Ayer fué la última salida de este año de los Zorros. Fué una salida tranquila y muyy, muyy bonita. Ya que la intención era que no fuera una salida excesivamente larga quedamos un poco más tarde de lo habitual. Cafetito, que eso no se perdona y el Patas y yo, que fuimos los que salimos ayer, emprendemos la subida dirección Begues por el Cami de la Roca Selena.
Antes de llegar al km.6, en la última "explanada", giramos a la derecha, en dirección a la Selva Negra, precioso camino, con un poco de todo, sendero, piedra, mucha vegetación, vamos una gozada aunque en más de una ocasión tengas que bajarte, ya que también es algo técnico.
De ahí vamos dirección a la carretera, hacia el Km.7. Lo que normalmente es la bajada hoy ha sido la subida, bonita, aunque complicada por la gran cantidad de piedra suelta que hay.
Llegamos a Begues y nos vamos hacia la pista que va a Torrelles para coger el senderito que sale a la izquierda. La intención era ir hasta la plaza de la Iglesia, por detrás, por los cerezos.
Que ratito más divertido. Nos dedicamos a pisar todos los charcos que estaban helados, con el consiguiente riesgo de caida, ya que alguno se rompía y se quedaba la rueda como un raíl. Por suerte y por que somos unos "máquinas" el suelo lo vimos desde las alturas y llegamos a tomarnos el café enteritos. Ya de allí, para casa que había que ir a comer a casa de la suegra.
Se acaba un año en el que hemos disfrutado muchísimo de la bici, de contarlo, de compartir experiencias con otros bikers, pero sobretodo, hemos disfrutado de la amistad. Además hemos conocido gente estupenda, como no podía ser de otra manera si montan en bici.
Antes de irme os quiero presentar a mis nuevas amigas.
Que calentito que va el pie ahora. Esto es otra historia. Se acabó acabar el pedaleo no sabiendo si tienes o se han caído los pies en algún momento, el llegar a casa y poner los pies en el suelo y notar el suelo de cerámica caliente, eso ya es pasado.
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